“Atender y entender estos tiempos
marcará la diferencia”
Nuestra calidad de vida no se define por nuestra estabilidad, sino por cómo gestionamos el cambio, el movimiento y la evolución.
¿Cómo nos preparamos para mantenernos a nosotros mismos y a nuestro sentido de identidad estables cuando la vida nos sacude?
¿Cómo entrenarnos para contrarrestar este fenómeno de aferrarse a lo seguro, a lo conocido?
Sin importar lo que puedas haber aprendido, la verdad es que la única respuesta válida tiene que ver con tu estado anímico. En tu vitalidad está la respuesta a la manera en que vas a reaccionar frente a cada momento de tu vida.